Toro es un municipio de la provincia de Zamora, en la comunidad autónoma de Castilla y León. Fue declarado Conjunto histórico-artístico por Decreto de 24 de octubre de 1963.
Existen diversas teorías acerca del origen histórico de Toro, de ellas la más aceptada, es la que identifica a la ciudad de Toro con el primitivo asentamiento vacceo de «Arbocala». De esa época sería uno de los principales símbolos actuales de la ciudad, el denominado verraco.
El año 899 es conocido en la historia de Toro como el de la repoblación de la ciudad. Así lo atestiguó el cronista del rey Alfonso III de Asturias, el obispo Sampiro. Hacia el 974, ya en el reinado Ramiro III de León, era considerada como cabecera de su comarca, el «Campo de Tauro».
A partir del siglo XII la ciudad se convirtió en un centro de poder político, religioso y militar. Su creciente importancia aumentó de forma decisiva tras la muerte del rey Alfonso VII de León, también llamado «el Emperador», y como consecuencia de la separación de los reinos de León y Castilla.
Entre los Siglos XIII y XIV se inició la etapa de mayor esplendor de la ciudad de Toro, en la que la sociedad civil se centró en la actividad comercia. Se considera que el detonante de ello fue la promulgación del primer fuero de la villa, otorgado en 1222 por Alfonso IX de León. De esta época destaca la figura de María de Molina, precursora de algunos de los principales monasterios de la ciudad.
Toro fue a finales de la Edad Media una de las principales ciudades de la Corona de Castilla, fue una de las dieciocho ciudades que podían enviar procuradores con derecho a voto a las Cortes de Castilla. La posición estratégica de Toro terminó situándola en un primer plano de la Guerra de Sucesión Castellana, siendo finalmente escenario de la batalla de Toro entre los partidarios de Juana de Castilla, llamada por sus adversarios «la Beltraneja», y los seguidores de Isabel la Católica.
La expulsión de los judíos de España de 1492 afectó de lleno a Toro que contaba con el barrio de la Judería en la zona este de la ciudad. En 1505 se reunieron en Toro las Cortes de Castilla. Las Leyes de Toro se promulgaron el 7 de marzo de 1505 y recogen un total de 83 leyes que resolvían múltiples cuestiones relacionadas especialmente con el derecho civil.
En 1943 la Diputación provincial elige mayoritariamente a su alcalde Ambrosio Delfín Álvarez Tejedor para el cargo de procurador en Cortes en la I Legislatura de las Cortes Españolas (1943-1946), representando a los Municipios de esta provincia.
¿Qué ver en Toro?
- Alcázar de la Ciudad de Toro (S. X).
- Colegiata de Santa María la Mayor (S. XIII). Precio 2 €.
- Monasterio de Sancti Spiritus. Precio 4,50 €.
- Los restos de San Pedro del Olmo.
- Restos de San Pedro del Olmo.
- Teatro Latorre.
- Puente (S. XV).
- Iglesias: San Lorenzo el Real (Precio 1 €), Santo Sepulcro y San Sebastián (Precio 1 €), San Julián de los Caballeros (Precio 1 €), San Salvador de los Caballeros (Precio 1 €).
- Ermita de Santa María de la Vega.
- Toro de piedra de origen vacceo.
- Exposición Edades del Hombre (Aqva) en Toro (Zamora), del 27 de abril al 14 de noviembre de 2016